
UNA JORNADA ROMÁNTICA DIARIO
Esta mañana me levanté muy temprano porque recibí un mensaje que me despertó a las seis y media. Cuando miré mi móvil, vi que el mensaje era de Luca. En su mensaje, dijo: “¡no puedo dejar de pensar en ti!”.
Me sentí muy emocionada al leerlo pero también un poco confundida.
Me duché, me preparé y fui a desayunar con mi familia en la terraza del hotel.
Me senté para comer cuando vino el camarero y me dio una pequeña carta con el siguiente mensaje: “Te estoy esperando en la playa”.
Fui a la playa pero no había nadie, sólo el mar azul cristalino y unos pinos al lado de la playa. Anduve hacia los pinos y de repente alguien me cubrió los ojos con sus manos, me besó suavemente en el cuello y me dijo: “te echo de menos”.
Cuando me di la vuelta, vi los ojos cariñosos de Luca, y me dio un enorme ramo de flores. Detrás de él, había una canasta de picnic llena de comida deliciosa. Nos sentamos en la playa, desayunamos juntos, hablamos y reímos mucho.
Después del desayuno, Luca miró hacia el mar y me dijo: “¿ves ese barco pequeño anclado cerca de la playa? Lo he alquilado para llevarte a las calas más bonitas de la isla”.
Acepté por supuesto y pasamos un día esplendido. Vi las calas más bonitas de la isla como Cala Macarellata y Cala Mitjana. Anclamos el barco en una cala preciosa y nos tiramos en el mar.
Al atardecer, dimos un paseo por la costa y Luca me cogió de la mano y me dijo: “Eres increíble, me voy a volver loco por ti”.
Pues, creo que yo también, me voy a volver loca por él.